Decidimos continuar con el tema da la semana pasada y hoy vamos a tratar lo que podría ser un capítulo anterior, que analiza una teoría de cómo funciona nuestro cerebro en la parte comportamental. Viene de la misma fuente del artículo de la semana pasada, que es el blog fitness revolucionario del español Marcos Vázquez y que en esta ocasión se titula SieteEstrategias para Fortalecer tu Voluntad y Evitar las Tentaciones .
El mencionado artículo comienza con unas citas que reproducimos a continuación:
Y que son un poco un reflejo de los conceptos que presentaremos adelante.
Luego asevera que la calidad de vida depende en gran medida de la calidad de nuestras decisiones y que por primera vez en la historia de la humanidad, nuestras decisiones son la primera causa de mortalidad. Es un poco irónico que el ser humano sea capaz de enviar robots a Marte, pero puede ser superado por una torta de chocolate.
Entenderemos por qué nuestras emociones nos hacen tomar muchas veces malas decisiones, y qué podemos hacer para evitar las tentaciones.
Nuestro cerebro, al igual que el resto del cuerpo, es el resultado de un largo proceso evolutivo. Simplificando, podríamos decir que esta evolución ha dado lugar a dos cerebros conectados pero separados.
Inicialmente desarrollamos el llamado cerebro mamífero o sistema límbico, donde se originan las emociones y muchos instintos que compartimos con otros animales. Las emociones representan una especie de sistema operativo rudimentario que nos guía hacia decisiones razonablemente buenas en un mundo salvaje. Nos motiva por ejemplo a comer, procrear y proteger nuestra descendencia.
Posteriormente evolucionó el cerebro racional, concentrado especialmente en la corteza prefrontal. Este trozo de materia gris representa la principal diferencia mental con el resto del reino animal. Nos da la capacidad de planificar el futuro y controlar nuestros impulsos.
Existe una analogía utilizada por muchos especialistas, de que el cerebro humana es un jinete montado sobre un elefante:
El elefante y el jinete no son enemigos, pero deben vivir en equilibrio. El elefante es especialista en tomar decisiones rápidas en situaciones extremas, donde no hay tiempo para consultar a nuestro cerebro racional. Si tuviéramos que esperar a que nuestro jinete decidiera escapar ante un ruido en la maleza, nuestra especie se hubiera extinguido hace mucho tiempo.
Al vivir rodeados de estímulos artificiales, que apelan constantemente a nuestros instintos animales, somos arrastrados por el elefante. Por muy buena intención que tenga el jinete, es incapaz de controlar a un elefante desbocado, alejándonos de nuestros objetivos de largo plazo.
En finanzas, la tasa de descuento permite estimar el valor actual de un pago futuro. Imaginemos que alguien nos ofrece $1.000.000 de pesos dentro de un año o una cantidad inferior ahora mismo. ¿Cuánto aceptaríamos recibir ahora?
El otro ejemplo es el test del marshmallow (o test de la algodón de azúcar). En este experimento, dejaban a niños solos en una habitación con una golosina, y les daban la opción de comerla inmediatamente o esperar unos minutos a que regresara el supervisor. Si esperaban, recibían una segunda golosina.
El artículo que estamos presentando luego presenta 7 estrategias para mejorar el autocontrol, de las que presentaremos 3en esta entrega, pero pueden leer el artículo completo en el enlace del principio.
Si el jinete no se compromete con nada, el elefante se distraerá con todo. Seremos como un barco a la deriva y solo alcanzaremos nuestro destino por casualidad.
Muchas veces, lo que aparenta ser resistencia del elefante es en realidad falta de claridad del jinete. Si el propio jinete no tiene claro adónde va, es más probable que se deje llevar.
La mayoría vive gran parte de su vida actuando de manera impulsiva.Imitan a los demás y toman decisiones basadas en su estado emocional, en lo que les apetece en cada momento.
Por el contrario, tener objetivos claros permitirá usar tu propósito como guía, en vez de las apetencias. Tomaremos decisiones con base en nuestros objetivos a largo plazo, independientemente del estado mental inmediato. La motivación fortalece al jinete.
Es muy importante escribir los objetivos, porque aumenta la probabilidad de alcanzarlos.
El primer paso para resolver un problema es ser consciente de su existencia. Y para la mayoría, dejarse llevar por el elefante no es percibido como un problema relevante.
Por ejemplo, los que desconocen todavía el poder de la comida real, van al supermercado y compran los productos con los que se criaron, a los que su paladar está habituado: Kellogg’s, galletas María… Cuando empiezan a leerlas etiquetas y comprenden la enorme cantidad de azúcar que estos productos contienen (entre otros muchos problemas), se ven obligados a revaluar sus elecciones.
El jinete es ahora consciente, y cuando el elefante le tienta con los productos de siempre, se genera un conflicto, que es percibido como una amenaza interna. Al contrario que las amenazas externas, que generan una respuesta de“lucha o huida“, la respuesta ante un conflicto interno (jinete contra elefante) debe disparar lo que los expertos llaman “pausa y planificación”.
El objetivo es crear un espacio entre la tentación y la respuesta, dando tiempo a activar la corteza prefrontal para elevar la capacidad de autorregulación.
Se puede formalizar este proceso, esperando un tiempo antes de ceder ala tentación. Un par de ejemplos:
¡No pensemos en una galleta! Si somos como la mayoría, una galleta es justo lo que tenemos ahora en la cabeza. Paradójicamente, intentar suprimir un pensamiento puede reforzarlo. Nada como pensar en dormir para seguir despierto.
Si aparece una tentación en nuestra cabeza, no intentemos suprimirla, sino examinarla. Por ejemplo, utilizamos muchas veces la comida como automedicación, como intento de gestionar alguna emoción, y entender esto es el primer paso para mejorar nuestra autorregulación. Debemos recordarnos en este momento que un pensamiento no lleva asociada necesariamente una acción.
Por otro lado, varios estudios indican que al proponer un pensamiento alternativo disminuye la obsesión por el anterior. Se trata de reemplazar el pensamiento que queremos evitar por otro menos dañino, en vez de intentar suprimirlo.
Una recomendación concreta, debemos pensar más en lo bueno que queremos lograr porque nos hará pensar menos en lo malo que quieres evitar:
Las tentaciones pueden fácilmente hacernos caer en comportamientos que no son buenos para la salud, pero existen estrategias que nos pueden ayudar a evitarlas y tener un conocimiento sobre como funciona nuestro cerebro en el aspecto comportamental, seguramente nos ayuda a facilitar el proceso.
Esperamos que haya sido de su interés este artículo y les recordamos que las pulpas de fruta, como las que AlimentosSAS ofrece, hacen que sea muy fácil la preparación de jugos naturales yrecetas con fruta, sin incurrir en los desperdicios que suelen ocurrir cuando usamos la fruta natural.
Que estén muy bien!